miércoles, 9 de mayo de 2007

muelas



(…) los finales suelen pillarme por sorpresa. El trabajo, las vacaciones, los noviazgos y las amistades acaban siempre sin darme apenas tiempo para prepararme. También las películas me provocan esta misma sensación e incluso mi carrera llegó a su fin de manera sigilosa y sin llamar a la puerta. No es que me sorprenda el final en si. Con apenas cinco años tuve que enterrar a “muelas”, mi primera mascota y único hamster, así que siempre he tenido claro que todo llega a su fin. Mi problema más bien tiene que ver con el momento y he acabado por vivir atemorizado algunos de los mejores de mi vida (…) Gracias al exagerado éxito de mi padre pude dedicarme durante toda mi vida a satisfacer inquietudes artísticas y profesionales. Lo que básicamente se resume en hacer siempre lo que a uno le da la gana. Mientras el ilusionista siguiera sacando conejos de su chistera yo no tendría que rendir cuentas a nadie. (…) A finales de los sesenta, vivía yo alejado del verano del amor y de la costa. De viaje sin fin. De placer en placer. De puerto en puerto. Alguna de mis primeras películas había sido un éxito en pequeños círculos intelectuales. Pero yo seguía sin interesarme excesivamente en mi carrera. Solo me interesaba disfrutar de aquella lujosa vida de navegante. (…) Fue en aquella época, despreocupado de todo lo que me rodeaba cuando la conocí. Se movía nerviosamente y solía sentarse en proa a escribir poemas en su pequeño cuaderno. Borraba cada una de las palabras que escribía, y a pesar de dedicar cada día tiempo a la escritura, aquella desgastada libreta permaneció en blanco durante años. La conocí en una pelea. Estaba a punto de noquear a uno de los camareros que servían champagne francés en una de mis fiestas a bordo, en el puerto de Saint Tropez. Y yo, todavía hoy, haría cualquier cosa por una copa de champagne. Viví junto a ella muchos años esperando a que todo terminara. Navegamos hacia el final, y mientras este no llegaba, dimos dos vueltas al mundo en mi velero. Como seguía sin llegar, decidimos pasar una vida juntos, aunque hay muchas más fotografías para hablar de ello. ( …)

1 comentario:

how does it feel dijo...

Supongo que verlo todo como un nuevo inicio mejora la prespectiva. Aunque nunca me han gustado las cosas nuevas. Solo por ser nuevo no implica que sea mejor. Me gustaría mojar la mano en este color azul... y ver como me sienta...